La industria y yo: Una relación de dependencia
¿Cómo impacta la industria en mi vida?
Pues, en resumen, en todo: productos y servicios que son básicos para mí, dependen del sector industrial. Siendo un actor tan relevante, sin duda les necesitamos para construir la sociedad que soñamos. Nos impactan de distintas maneras y me hace preguntarme: ¿hay alguna forma en la que YO puedo impactar en este ámbito?
Leyendo un artículo me encontré con la pregunta: ¿Cómo impacta la industria en tu vida?, entendiendo a la industria como todas las empresas públicas o privadas. Fue inesperado y sirvió para que me detuviera unos minutos a pensar.
Rápidamente pude ver los múltiples puntos de contacto que tengo con el sector. En lo más evidente, productos y servicios básicos como la electricidad, el agua y los alimentos que adquiero, dependen de la industria. Se podría decir que el sector empresarial moldea en cierta medida la forma cómo vivimos en la actualidad. Así que, podemos acordar que son un actor clave de la sociedad, ¿cierto?
En lo profesional, tengo mayor experiencia trabajando en el ámbito privado que en otros sectores. Cuando comencé, me dije que sería solo por un tiempo, mientras conseguía algo que me apasionara más, pero la verdad, me enamoré de mi trabajo. Pude evidenciar de primera mano el gran impacto positivo que se puede generar desde el mundo empresarial y desde entonces, me quedé.
La unión de la industria con la gente: valor compartido
Volví a la universidad, para aprender del rol del sector industrial en cuanto al impacto social, y así fue como conocí el concepto de valor compartido.
Propuesto por Porter y Kramer, el valor compartido son políticas y prácticas operativas que mejoran la competitividad de una empresa al mismo tiempo que mejoran las condiciones económicas y sociales en las comunidades en las que opera.
Cada día, la industria se transforma a través de la innovación. Nuestra apuesta debe ser a que esa transformación surja con una visión de valor compartido. Por eso es tan importante el ODS 9: Industria, innovación e infraestructuras.
Este Objetivo de Desarrollo Sostenible propone construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación. ¿Hay algo que nosotros podamos hacer para contribuir a alcanzar este objetivo? Pues, te cuento que sí.
Así como la industria moldea la sociedad y la forma en que vivimos, también nos necesita. Nuestras acciones y elecciones tienen un gran impacto y pueden llegar a moldear la forma en que el sector industrial se desempeña. Déjame compartir un ejemplo.
Me encontré con un artículo que plantea que la industria de fósiles se está quedando sin talento. De acuerdo con una investigación realizada en el Reino Unido, la mitad de los colaboradores pertenecientes a la Generación Z han renunciado a un trabajo debido a conflictos de valores.
El 48% de las personas de entre 18 y 41 años están dispuestas a aceptar una reducción salarial para trabajar en una empresa que se alinee mejor con sus valores de sostenibilidad.
Esto implica desafíos importantes para la captación de talento en el sector. Por consiguiente, genera una presión adicional en las empresas por innovar para desarrollar prácticas sostenibles.
De esta forma es que los ciudadanos podemos moldear el proceso de industrialización. Es clave que sigamos eligiendo productos y servicios alineados con nuestros valores, que ejerzamos presión y que alcemos la voz para seguir construyendo una sociedad próspera para todas las personas.
Y aunque a veces creamos que nada cambia, sólo basta con echar un vistazo 10 años atrás y podremos evidenciar lo que hemos avanzado. Nuestros esfuerzos individuales se van volviendo colectivos.
Si quieres conocer más de este tema, te invito a escuchar el nuevo episodio del podcast Agenda el Cambio, en el que Cristina Montecinos nos cuenta más a fondo sobre el ODS 9 y qué podemos hacer para seguir impulsando el cambio.