Escapando del burnout como equipo

El simple hecho de ver esas categorías me ayudó a ver dónde puedo comenzar a trabajar para sentirme más aliviada, y cómo puedo apoyarme en los demás. 


Por Cristina Montecinos

Hace unos meses escribí un artículo sobre mi miedo a “perder el carnet de emprendedora” porque aplico en mi vida las claves típicas del bienestar: dormir bien, hacer espacio para mí en la semana, reducir el uso de pantallas, etc. Esto significa que no doy el todo por el todo por mi empresa (Mara), sino que trato de balancear el mundo laboral con el personal, sin que uno tome el espacio del otro: tomo vacaciones, el fin de semana me desconecto, no trabajo hasta altas horas de la noche, y ahora que tengo un equipo, los incentivo a que sigan mi ejemplo. 

Mara ha cambiado bastante desde esa época y he notado que el mayor cambio para mí es que pasé de ocuparme de muchas tareas operativas, a enforcarme en temas más abstractos, como la cultura de la empresa y la gestión del equipo. 

Las técnicas que mencioné en el artículo del carnet de la emprendedora me ayudaron con el balance del trabajo operativo con la vida personal. Pero este año me encontré con un nuevo reto: la carga emocional que genera liderar un equipo

Casi me quemo 🔥

Este año, 2022, he caído al menos dos veces en un espiral de emociones y desmotivación donde he dudado de mis capacidades y de la decisión de haberme lanzado a emprender sola. Cuando estoy en un buen lugar emocional y surgen estas dudas, no tengo problema en racionalizar y ver que sí tengo todo lo necesario para lograrlo, y más importante, sé dónde buscar ayuda para las cosas que no tengo. Para los momentos en que no puedo sacarme sola de este espacio negativo, tengo una red de varias personas en las que me puedo apoyar: mis padres, amigas creativas y emprendedoras, mi novio, y por supuesto, el equipo. 

Sin duda hay veces que me pregunto si es está bien que comparta tanto de mí con ellos, sobretodo temo que hablar de mis vulnerabilidades les haga confiar menos en mi habilidad de liderar la empresa. 

Betterfly publicó un test hace un tiempo que te permite conocer tu desgaste emocional, se llama Test Maslach, Burnout Inventory (MBI). Mide el cansancio emocional, la despersonalización y la realización personal. Me gustó ver mi estado actual dividido en estas áreas porque es más específico que los típicos síntomas como cansancio, desmotivación, frustración, etc. El simple hecho de ver esas categorías me ayudó a ver dónde puedo comenzar a trabajar para sentirme más aliviada, y cómo puedo apoyarme en los demás. En este momento el área que debo trabajar más es el cansancio emocional.

Gracias a la dinámica que tenemos en el equipo, me sentí cómoda hablando con ellos y transparentar que no estoy en un buen lugar ahora. Su respuesta fue apoyarme y manejar el día a día mientras estuve desconectada unos días. Para muchos emprendedores, la idea de alejarse tanto del negocio y dejarlo en manos de alguien más por unos días es desesperante. Para nosotros, funcionó bien. 

Prevenir🩹 en lugar de sanar el burnout 

Como mencioné antes, este año he pasado al menos la mitad de mi tiempo pensando en las dinámicas de equipo y parte de ello ha sido descifrar cómo puedo mantener la motivación de todos (incluida la mía), sobre todo cuando tenemos recursos acotados. 

Mi meta en este momento es sentar los cimientos de la cultura organizacional de Mara y que perduren en el tiempo. Estoy tratando de replicar lo que he leído y escuchado sobre empresas ya establecidas y más grandes, teniendo como meta crear un ambiente donde a mí me gustaría trabajar. Donde todos nos podamos expresar, donde trabajemos juntos y enfrentemos retos en equipo. Un espacio de crecimiento. 

Mara está en ese punto dulce donde tenemos tareas fijas definidas y mucho espacio para inventar nuevas. Solo el comienzo del libro está escrito, así que lo podemos llevar a donde queramos. 

Para eso es necesario que todos podamos mantenernos motivados, creativos y pensando de manera innovadora.

Es bien sabido que el burnout es un peligro latente. Por eso creo que es importante hablar abiertamente de esta situación, reconocerla y entender en qué consiste. Me gustó este artículo de Harvard Business Review donde se explican tres tipos:

 

  1. Burnout por sobrecarga: quizás el más conocido. Se da cuando trabajas demasiado para alcanzar el “éxito” dejando de lado tu bienestar físico y mental. 

  2. Burnout por falta de estimulación: completamente opuesto al anterior. Este se da cuando te sientes aburrido, tu trabajo no te estimula y te vuelves cínico y letárgico.

  3. Burnout por negligencia: ocurre cuando no hay suficiente claridad, guiatura o estructura en el equipo.  

Por supuesto, como toda empresa, ya hemos tenido momentos en que alguno ha caminado por esos caminos. Lo que me llena de tranquilidad es que han hecho uso de nuestras reuniones one-on-one, se han sentido cómodos para levantar la mano, decir lo que sienten, y juntos hemos hecho los cambios necesarios. 

Creo que mientras sigamos iluminando estas grietas a medida que aparecen, podremos arreglarlas antes de llegar a quebrarnos. 

Podcast recomendado:

El episodio “El síndrome de estar quemado o burnout” por Entiende tu mente

Entiende Tu Mente es un podcast de psicología que, de una manera amena, te cuenta cómo funciona nuestra mente.

Episodios: 249 y contando

Duración aproximada: 20 minutos

Voces: Molo Cebrián (podcaster y estudiante de psicología), Luis Muiño (Psicólogo y uno de los divulgadores de esta temática) y Mónica González (Coach y profesora universitaria)

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